sábado, 7 de agosto de 2010

El triángulo amarillo: estadio, sede y bar


El triángulo amarillo: estadio, sede y bar

©J.DG.2010.LAS PALMAS

In memoriam :ORENTINO NESPEREIRA VIDAL

Sabadelle(Ourense) 1926-Las Palmas 2010


Desde muy niño “Toño”, como le llamaban sus amigos, empezó a trabajar para el negocio familiar. Años de mucha carestía y pobreza que se agudizaron con la llegada de la guerra civil en 1936. En los duros años de posguerra, aprendió con el trabajo y de los que liquidaban sus facturas en especies, en sacos de papas o pescado salado. Supo de las cartillas de racionamiento y de la emigración clandestina a Venezuela por los barrancos del sur. Y de la abundancia de pulpos en la Alcaravaneras.

Toño Nespereira ejerció en su Bar Vigo como un “patrón” a lo Santiago Bernabéu, con su hermano Lolo detrás, en la intendencia, a lo “Raimundo Saporta”. Toño, era un hombre jovial que contaba chistes ingeniosos, inventaba recetas gastronómicas, además de honesto, cordial y respetuoso. Se abrió el Bar Vigo en 1944, justo cuando se abre el Estadio de Las Palmas .El nuevo campo proporcionó mucha clientela al bar, que rebosaba los días de partido hasta el punto de colapsar la calle .

Toño era marinista en aquel entonces y Luis Molowny su ídolo futbolístico. Continuó admirando al “niño” tras su pase al Real Madrid, haciéndose seguidor merengue desde entonces. Tras la llegada de DiStéfano, al que vió por primera vez con el Millonarios de Bogotá en Las Palmas, se convirtió en un ortodoxo de la “casa blanca” y con pasión relataba las hazañas de su Real Madrid ante Las Palmas, equipo que estuvo mas de veinte años sin ganarles. Criado allí mismo, en el bar, supo combinar el buen trato personal con una carta de raciones que ha llegado a ser de lo mas reconocido de la gastronomía canaria.

Tras la creación del equipo único, la Union Deportiva en 1949, el Bar Vigo es partícipe desde aquellos primeros momentos en muchas facetas de la entidad y de las personas que a su alrededor convivían. El triángulo estadio, sede y bar fue una constante en el devenir de la historia del equipo amarillo mientras coexistieron los tres lugares.

En los domingos de fútbol en los años cincuenta, la calle Ingeniero Manuel Becerra de acceso al estadio se llenaba de un gentío que primero subía hasta el viejo coliseo, y al término del partido, bajaban hacia las paradas de la guagua en la “carretera” del Puerto. Era obligado detenerse en el Bar Vigo, donde en una gran pizarra se mostraban los resultados de los partidos , que iba rellenando Lolo con los datos que desde Italcable le transmitían al único teléfono de los alrededores.

En todos los años en que fueron vecinos, el “bar” surtía al “club” de bebidas y comidas diversas cuando se celebraban juntas o era menester. Por otro lado, en el local se reunían jugadores en sus salidas de los entrenamientos o en esperas para cobrar o negociar con los directivos, mientras jugaban a los “flippers” o ponían discos mejicanos en la “gramola” .Casi todos los que vistieron de amarillo hasta los años ochenta estuvieron en la barra del bar .

Durante muchos años llevaron al campo termos de café y agua fresca para tomar en el descanso en la caseta amarilla. Fue el Bar Vigo donde surgió la idea de “tropical con sevenup” mezcla que daba un toque recuperador a los equipiers amarillos en los años de mayor gloria,en los sesenta poco después de la llegada del refresco americano a las islas.

El negocio creció con la clase media incipiente que en los años setenta residía en Las Palmas .Muchos personajes en torno al equipo amarillo fueron clientes fijos o eventuales en el bar: futbolistas y directivos amarillos, periodistas, como Juan Gol, Antonio Ayala, Antonio Lemus, Pascual Calabuig, Luis García Jiménez y otros paraban tras la barra a refrescar el gaznate , conversar, discutir o “vacilar” si era preciso, para lo que Toño y Lolo siempre estaban dispuestos.

Completaban la clientela del Bar Vigo empleados, estudiantes de “lalaguna”, profesionales y algunos intelectuales , que casi a diario, en determinadas horas, rebosaban saliendo por sus puertas y en la acera de la calle renombrada como Manuel Gonzalez Martín. Era el primer “botellón” que se recuerde en la ciudad en esa época, pues desde entonces se bebían las cervezas en la calle.

El cierre del bar en 1986,fue evento en el barrio de las Alcaravaneras cuando el viejo edificio estaba cayéndose y en peligro de derrumbe. Con mucho humor se decía que el techo era “gótico”, porque caían infinidad de gotas cuando llovía. Durante mas de cuarenta años había sido lugar de encuentro por donde pasaron personajes de todo tipo. Canarios y foráneos. Todos degustaron las tapas y el “ribeiro” gallego, encaramados en sus altas butacas ante la barra de mármol. Al cierre fueron muchas las despedidas. Nanino Diaz Cutillas, habitual devorador del pulpo “alangostado” junto a un “biberón”, realizó un emotivo reportaje para TVC. Eduardo Millares "Cho Juaa" era cliente habitual y gustaba acomodarse en una esquina de la barra. El escritor J.J. Armas Marcelo hace una cita del bar en su novela “Cuando éramos los mejores”, y así muchos otros artistas canarios que frecuentaron el lugar, como el pintor Elías Marrero y hasta algunas famosas actrices como Lea Zafranni o la italiana Cicciolina degustaron tapas en el bar en alguna ocasión.

Desapareció el viejo local pero el despacho de los pejines, caracoles, pulpos y demás “exquisiteces” continuó en la esquina de la calle Olof Palme en la Peña La Vieja de Las Canteras. Cuando se hizo el traslado, la sede de la U.D. estaba en Pio XII y el Estadio Insular quedaba un poco lejos, pero a pesar de todo, sus preparaciones culinarias seguían atrayendo a una nueva clientela, y los hermanos continuaron con el bar hasta el traspaso por jubilación allá por 1994.

Toño vivió toda una vida en el Bar Vigo donde aprendió de los clientes, los buenos y los malos; de los empleados ,los cantamañanas y los leales. De los futbolistas y los directivos.De los estudiantes y de los borrachos.De escritores y filósofos. De los primeros turistas y de los últimos juerguistas.

Ya se ha ido y nos deja como recuerdo su buen humor con el que nos hizo la vida a los demás más agradable a partir de cosas sencillas. Ahora, uno echa de menos a quienes, como Toño, junto a su hermano Lolo, nos alegraron la existencia con los sabores de sus empanadas, pulpo, caracoles, calamares, pejines, etc ...Refrescando con los “biberones” o el “ribeiro” , sus chistes y ocurrencias. Compartió todo ello junto a su esposa Sarito, sus hijos Estrella y Carlos. Sus nietos Ana (†), Rubén , Michael y Darío. Su hermano Lolo y sus otros hermanos . Su familia política. Sus amigos y conocidos.


El 2 de agosto de 2010 falleció en Las Palmas de Gran Canaria.

Mas información en : “http://www.historiadelfutbolcanario.com


3 comentarios:

Anónimo dijo...

Admirable recordatorio Yo no solo había sufrdo ya el pesar de la noticia de la muerte de Toño sino que tambien estaba pendiente de publicar algo sobre el particular porque ese (su bar) era el rincon de los periodistas que íbamos a la sociedad de la U .D., contigua o frontal al BAR VIGO , en cuyas reuniones habia sempre un receso para que
un de los hijos entrara y saliera cargado de modestas tapas,. y bebesterío, Todo con mucho sigilo porque no estaba bien visto .que se gastara el dinero así en tapas y bebidas con periodistas ,por cierto muy pocos ,(LEMUS, CALABUIG,, LUIS GARCIA JIMENEZ, josemª Ayaso , AYALA, REALITO ,MIGUEL JIMENEZ MARRER alguo mas.
¡¡y pensar en que ahora en cada partido se forma un tenderete de ",delicateses" que te parte el alma tanto como te jode el estómago¡¡ .

.Recuerdo que no hace mu.cho yo seguia yendo a las canteras donde habían puesto su sucursal de los caracoles . Lo tenian cerca de la calle Pelayo (las 40 casas donde nacieron Manolin y Tatono jugadores que fueron de la ud,) donde yo tuve mi primer trabajo civil en Gran Canaria. Cuando tengas hecho ese reportaje me avisas me gustaría leerlo.
Pascual Calabuig

Anónimo dijo...

Buenas tardes,Javier
Mis condolencias para tu esposa y para ti.Hombres como tu suegro hicieron a esta ciudad grande y singular
en tiempos extremadamente duros y difíciles.El "BAR VIGO" forma parte importante de las vivencias de
algunos de los nacidos en esta ciudad.Muchos "chuchangos" y pulpos,acompañados de botellones.
Buenas parrafiadas he tenido con Eduardo Millares "Cho Juaa",parroquiano fiel.
Te reitero mi más sentido pesame para tu esposa y para ti.
Recibe un cordial saludo
Agustín Hernandez

Anónimo dijo...

Desde Orlando, Florida mi mas sentido pésame por el fallecimiento de tu suegro. Nuestras condolencias a Estrella y familia. Siempre recuerdo al volver de La Laguna parar en el Bar Vigo, antes de pasar por casa, a comer "chuchangos" con "biberones" de Tropical y charlar con la numerosa parroquia.....
Angelito